Sin Título (Kassel, 2002)

Título: Sin Título (Kassel, 2002)

Año: 2002

Medio: Video Performance – Instalación con sonido

Materiales: Alemanes, armas de fuego, ropa negra, plataforma de madera, vigas de metal, 40 lámparas de 750 watt, disco DVD, Reproductor de DVD, proyector.

Dimensiones: 5.80 m x 18.16 m x 3.96 m

Declaración

Sin título (nombre de la ciudad, año de realización de la obra) es una serie donde el título mantiene su estructura pero adscribe, en cada nueva obra, la especificidad de la ciudad y el año en el que se realiza para poder así hablar en términos de Momento Político Específico (political timing specific). Sobre el imaginario político que generan los lugares en los que se desarrolla, la perspectiva desde donde se realizan las obras es la de aquéllos que no pertenecen a ese contexto, ni han sido parte de la historia que los ha construido. Las obras producidas en este conjunto intentan desmitificar la imagen política a priori que se establece sobre determinados espacios sociales por parte de quienes son ajenos a ellos. La necesidad de cambiar esa imagen se experimenta manipulando sus símbolos políticos por antonomasia. El conocimiento superficial que tenemos sobre la realidad de una sociedad ajena suele basarse en la información que se desprende de la difusión de sus estereotipos, a partir de lo que se construye una imagen preconcebida de la misma que se instaura en la conciencia colectiva y modela un estado de opinión. El hecho que la serie se titule Sin Título -y entre paréntesis encierre el lugar donde se va a realizar la obra y el año-, es una invitación a enfrentarnos a un contexto socio-político sobre el que carecemos de conocimiento pero del cual tenemos una opinión. Es un llamado a comprender la transitoriedad y la fragilidad de las definiciones sobre los contextos que no son propios, para entender que su realidad es más compleja que la información que sobre ella creemos tener. 

Para el caso de Sin Título (Kassel, 2002) se realiza durante Documenta 11. La artista trabaja con las memorias sobre Kassel, ciudad en la que se encontraba una fábrica de municiones de importancia durante la Segunda Guerra Mundial. La obra evoca el ambiente militar de la fábrica, que puede ser asociado con la experiencia de torres de vigilancia de una prisión. La instalación consta de una fila de bombillas de 700 watts,  de la que emana una poderosa e intensa luz bajo la cual el público adquiere un efecto de ceguera momentánea y calor incómodo. Se oyen los pasos de botas militares que provienen del techo de la estructura que está en el espacio, con lo que el público experimenta la sensación de que caminasen por encima de ellos. Simultáneamente, el sonido de una pistola y un fusil que son rastrillados, aunque nunca se disparan se escucha proveniente de dos lugares en el espacio, uno de ellos es móvil. Como si se estuviera en el momento antes que algo pase y se detuviera el tiempo. No se ve a nadie haciendo esta acción, lo cual cambia si uno se encuentra en un lugar muy específico en el espacio, desde donde puede ver que los sonidos son generados por personas. Las luces se apagan por  algunos segundos lo que crea un sentido de pérdida en el espacio que algunos experimentan como sensación de miedo y otros como la oportunidad para entrar en un espacio de reflexión interna. En este momento aparece la imagen proyectada de una persona que corre a contraluz seguida de una lista que revela cien lugares en el mundo donde se han producido masacres y genocidios por motivos políticos. El listado comienza con eventos ocurridos después del fin de la Segunda Guerra Mundial e incluye los que hayan sido ordenado por un gobierno o por individuos. La lista muestra que un porcentaje casi total de estos acontecimientos locales han tenido algún tipo de relación con el gobierno de los Estados Unidos, una de las excepciones es Nueva York, 2001, lo cual hace referencia a Septiembre 11.

La obra sitúa al espectador en un estado vulnerable en el que se siente constantemente amenazado en un ambiente opresivo e inseguro debido a los referentes político militares que maneja la pieza. Se intenta que se experimente la política como vivencia personal, como una sensación física. A partir de la respuesta que dio la inmensa mayoría de los habitantes de Kassel entrevistados que vivieron en la ciudad durante la época del gobierno nacionalsocialista: no sabía, se genera el interés de esta obra por explorar la responsabilidad personal ante acontecimientos que todavía no se han convertido en históricos y hacia los cuales no se ha llegado a tener un consenso de que es lo «correcto» que se debe hacer. Es una exploración sobre la conciencia histórica y política.

Muestras

2010

Move: Choreographing you. Hayward Gallery, Southbank Centre. Londres, Inglaterra. Curado por Stephanie Rosenthal. (catálogo)

13 de octubre – 9 de enero. 2011

Tania Bruguera: En el imaginario político(Muestra retrospectiva). Neuberger Museum of Art, Purchase College, State University of New York. Purchase, Nueva York, Estados Unidos. Curado por Helaine Posner. (catálogo)

28 de enero – 11 de abril

2006

Maintenant, ici, là-bas. Frac Loraine. Metz, Francia. Curado por Beatrice Josse. (catálogo)

16 de septiembre – 5 de noviembre

2003

The living museum. Museum für Modern Kunst (MMK), Frankfor, Alemania. Curado por by Udo Kittelmann. 

16 de mayo – 29 de junio

2002

Documenta 11. Kassel, Alemania. Curado por Okwui Enwezor. (catálogo)

8 de Junio – 15 de septiembre

Documentación

Acceda al VIDEO parte de la instalación

Documenta XI

Kassel, Alemania

fotos: Sebastian Isacu

Museum für Modern Kunst (MMK)

Frankfurt, Alemania

fotos: Axel Schneider

Frac Lorraine

Metz, Francia

fotos: Yuneikys Villalonga

Selección bibliográfica

(por orden alfábetico)

Mauch, Stephanie.  «Tania Bruguera«, Documenta 11_Platform 5: Ausstellung/Exhibition. Ed. Hatje Cantz Verlag Publishers, 2002.  (Ilust.) p. 50 ISBN 3-7757-9087-X.

Documenta 11_Platform 5: Exhibition, Ed. Hatje Cantz Verlag Publishers, 2002. (Ilust.) p. 220. ISBN 3-7757-9086-1.

Griffin, Jonathan. Tania Bruguera: Cuba, performance and society’s relationship to its history”, Frieze, Nr. 118, Octubre 2008. (ilust.) pp. 286 – 287. ISSN 9-770-962-067014

Krüger, Juliane. «Juliane Krüger & Tania Bruguera (interview)«, XXD11.Ed. Bernhard Balkenhol, Heiner Georgsdorf, Pierangelo Maset. Textos por varios autores. Ed. Kassel University Press. (ilust.) pp.76 – 79. ISBN 3-89958-506-2.

Genocchio, Benjamin. «A Performance Artist and Her Greatest Hits«, New York Times, NY/Region, Art Review/Westchester. Publicado el 12 de febrero, 2010.  Nueva York, Estados Unidos (ilust.)

Lepecki, André. «Tania Bruguera:Untitled (Kassel, 2002),» Published on the occasion of the exhibition «Move: Coreographing you«, curado por by Stephanie Rosenthal, Ed. Publicado por Hayward Publishing, Octubre 2010. Arts Council, Londres, Inglaterra (ilust.) pp. 90 – 93. ISBN 978-1-85332-282-2

Levin, Kim. The CNN Documenta”, The Village Voice. 9 de julio, 2002. p. 57.

Villalonga, Yuneisky «Tania Bruguera: su Lugar y su Momento; Maintenant, Ici, La-Bas [Now, Here, Over There]» Frac Lorraine. 2007 (ilust.) pp.74 – 95. ISBN 978-2-911271-11-3

Citas

En el caso de piezas como «Sin Título, Kassel (2002)», que se expone ahora en Metz, se establece una relación entre la dificultad de la experiencia y la «voluntad de conocimiento». En el espacio de exposición, el público recorre una trayectoria lineal, mientras se proyectan en una pared lateral 100 nombres de ciudades (uno por cada día que se exhibió la pieza en Documenta XI) en que han ocurrido masacres por razones políticas, después de la IIGM. Éstas son intercaladas entre la imagen de una persona que corre a contraluz. Sólo vemos su perfil, como vemos el de la gente que camina delante de nosotros en la pieza, o como somos vistos por los que vienen detrás cuando, en determinado tiempo, se encienden reflectores que «ciegan» al espectador. Se escucha entonces, también, los pasos de botas militares, que vienen de arriba. Una pistola y un fusil son rastrillados constantemente, aunque nunca se disparan. Dos voluntarios locales, trabajan como performers. No se pueden ver, pero se sienten. La acción se queda en la amenaza. La experiencia visual se traslada al resto de los sentidos (los reflectores han aumentado considerablemente la temperatura de la sala). Durante unos segundos se vuelve a la oscuridad de nuevo. «…la oscuridad es importante para estar solo, para pensar, para estar sin lugar…» dice ella.

Yuneisky Villalonga,  «Tania Bruguera: su Lugar y su Momento» Frac Lorraine. 2007

«…Sin Título (Kassel, 2002), una instalación para la Documenta 11 donde los propios espectadores fueron sometidos a interrogatorio. Un bastidor de gran alcance de 750 vatios de luces ardían abajo de la entrada del espacio, retrasando una realización de un clickeo metálico que provenía de un hombre que cargaba y recargaba un arma de fuego. Cuando las luces se apagaron completamente durante unos segundos, un monitor podía ser visto con los nombres de lugares en los que las masacres políticas han tenido lugar desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Al igual que con su trabajo anterior en La Habana, Sin Título (Kassel, 2002) emplea la oscuridad y la luz como metáfora del pasado y el futuro para la memoria y el olvido … «

«…Esta ‘política como sensación’ se activa en Sin título (Kassel, 2002) mediante un dispositivo extraño -andamios, tablones y 30 000 vatios de energía dirigidos a intervalos regulares directamente a la línea de visión del público. En la oscuridad, intérpretes presentan una coreografía de cierre y carga de rifles a ritmos precisos y marchan alarmantemente en torno a una periferia que funciona menos como marco de una obra de arte que como frontera o muro de una cárcel. Sitios apenas memorables de terror político, desde 1945 (Cheiu, Corea del Sur) hasta 2002, el año en que se creó la instalación (Netanya, Israel), intercalados con secuencias en blanco y negro de personas corriendo. Fusionando el llamado del filósofo Pilles Deleuze a una estética de la sensación ‘inseparable de la acción directa sobre el sistema nervioso’ con la penetrante idea de Giorgio Agamben de que ‘el campo [de concentración] es la matriz oculta y el nomos del espacio político en que aún vivimos’, la ‘política como sensación’ de Bruguera se niega a ser puramente descriptiva de nuestra condición actual. Ofrece al menos una línea de escape: la posibilidad de conciencia histórica y política. Esta conciencia se produce mediante la percepción visceral y cinética de la situación en que nos encontramos. La luz y la oscuridad, los sonidos de pisadas fuertes en los andamios, el cierre de los rifles, operan en conjunto para dirigir nuestro movimiento: para congelar, pisar con vacilación, entrecortadamente, tratando de no tropezar. No podemos sino evaluar la situación en que estamos y decidir con cuidado nuestro siguiente movimiento. Asaltados por sonidos amenazantes y una sensación de mareo y disolución, moviéndonos a ciegas y con lentitud por el local, experimentamos una sensación de desorientación que nos empuja a una conciencia de nuestro estado generalizado de emergencia… y de nuestras propias acciones en esta condición…»

Lepecki, André. «Tania Bruguera:Untitled (Kassel, 2002),» Publicado en ocasión de la muestra: «Move: Coreographing you,» Londres, Inglaterra.