con Ashton Cooper
21/10/2014
De: Cooper, Ashton. «Artist Tania Bruguera Gathers Postcards for the Pope,» BLOUIN ARTINFO: Venues: Solomon R. Guggenheim Museum. Ed.Louise Blouin Media (illust.) October 21, 2014, New York, United States.
La artista Tania Bruguera reúne postales para el Papa
con Ashton Cooper
La artista Tania Bruguera, nacida en La Habana y residente en Nueva York, ha tratado repetidamente en su obra temas relacionados con la inmigración, pero un nuevo proyecto hace frente al problema de los inmigrantes indocumentados dirigiéndose directamente al Papa. «El efecto Francisco», que debutó en el Museo Guggenheim a principios de este año como parte de «Bajo el mismo cielo» y se exhibe en estos días en el Museo de Arte de Santa Mónica, es un proyecto que consiste en reunir miles de postales que le suplican al Papa que convierta a Ciudad del Vaticano en un refugio para inmigrantes indocumentados. Hablamos con Bruguera vía correo electrónico sobre cómo hacer arte en espacios públicos, cómo reunir firmas en Dallas y sobre la legislación del Vaticano.
Actualmente trabajas en «El efecto Francisco», un proyecto sobre la inmigración para el cual estás reuniendo postales firmadas para enviárselas al Papa Francisco y pedirle que le conceda ciudadanía a los inmigrantes indocumentados. ¿Qué te inspiró a llamar la atención sobre este problema de esta manera singular? ¿Por qué postales?
«El efecto Francisco» surgió de diversas formas mediante un proceso organizativo basado en la colaboración. Si bien la idea central y una gran parte de la realización del performance lo inicia una sola artista, Tania Bruguera, su ejecución es el producto de un debate colectivo. Por tanto, las respuestas que siguen se mueven entre lo singular y la voz plural.
Al responder a la pregunta de cómo abordar la política de inmigración mediante una práctica del performance comprometida con las políticas de eficacia individual, se me acercaron tres organizaciones nacionales de arte diferentes para participar en una exhibición (en el Museo de Arte de Santa Mónica), para que aportara un proyecto de culminación como merecedora del Premio Meadows (Escuela de Arte de Meadows de la Universidad Metodista del Sur) y para que creara una obra de performance dirigida a una nueva iniciativa global (La iniciativa de arte global Guggenheim UBS).
El concepto de «El efecto Francisco» es una extensión de mi reciente proyecto a largo plazo «Movimiento Inmigrante Internacional», que también incluye la articulación de otros rituales mediante lo cuales las políticas se escenifican en espacios públicos, particularmente en este proyecto en la persona pública del Papa Francisco. Dirigido a combatir la «cultura de la indiferencia», con un interés específico en los inmigrantes, «El efecto Francisco» apela al Papa para que ejerza su poder como líder político al tiempo que convierte un acción colectiva de petición, con cerca de 15000 postales firmadas, en una forma de performance duracional. La postal muestra la figura del supercontinente Pangea que simboliza un mundo que era y puede ser de nuevo la declaración de que «La dignidad no tiene nacionalidad».
Hasta ahora tienes más de 12000 firmas. Las recogiste a la entrada del Guggenheim como parte de «Bajo el mismo sol», y este mes las recogerás en Dallas como parte de un proyecto con la Escuela de Artes Meadow de la UMS y el Museo de Santa Mónica ¿Qué tipos de reacciones ha provocado el proyecto? ¿Qué diferencia hay entre la reacción de la gente en Nueva York y la de Dallas y otros lugares?
El performance de Nueva York generó una respuesta internacional de gran magnitud, ya que la muestra «Futurismo italiano» estaba abierta y también su colección de arte europeo del siglo XX. En general, los visitantes dedicaron su tiempo a considerar si una acción política podría ser una obra de arte y a expresar sus puntos de vista sobre la inmigración. Al realizar esto en la acera de la puerta de entrada del Guggenheim, me interesaba que el museo no fuera un destino donde podía verse una obra de arte, sino más bien un sitio temporal para hacer una pausa de aprendizaje. Estoy interesada en el potencial del arte para cambiar subjetividades. Después de que un miembro del público comprendió por qué yo, como artista, estaba solicitando apoyo para escribirle al Papa, se iniciaron muchas conversaciones interesantes.
En el Museo de Arte de Santa Mónica, la obra había sido presentada dentro del espacio de la galería donde el público podía firmar la petición dentro del contexto de la exhibición «Cultura de ciudadano», que incluye obras de otros artistas, arquitectos, diseñadores, pensadores creativos y colectivos que han reconfigurado las políticas públicas sirviéndose de estrategias estéticas. En Dallas, la obra se activó en la Catedral de Guadalupe, una inmensa iglesia católica donde asisten a misa 10000 personas los domingos. Muchos de los feligreses firmaron pero el sacerdote encontró un problema en el proyecto ya que era arte que, según su opinión, no era lo suficientemente del «mundo real». Por otro lado, cuando nos acercamos a un grupo que administra un parque y en ocasiones encarga performances públicos de arte, su problema fue que el proyecto era demasiado «real» y no guardaba mucha relación con el arte.
Considerando todas estas cosas, recibimos una respuesta inmensa, reunimos casi 1000 firmas en dos días en Dallas. Los números siguen creciendo en Santa Mónica también. Estas reacciones opuestas y la capacidad que tiene la obra de relocalizarse en diversas condiciones o contextos, ponen de relieve las tensiones provocativas y las potencialidades que son posibles dentro de un arte político de performance.
Como parte del proyecto activo «El efecto Francisco», la gente también puede firmar una petición online en el sitio web «La dignidad no tiene nacionalidad». ¿Cuántas personas han firmado esa petición hasta ahora?
Sorprendentemente, en estos tiempos y era de redes sociales virales, la mayoría de los seguidores han participado personalmente, con cerca de 12000 postales firmadas in situ. Los seguidores online son aproximadamente 2000.
También esperas reunirte con el Papa en persona. ¿Qué esperas saldrá de esa conversación?
Conseguir una reunión con el Papa será la culminación de mi proyecto. Mi objetivo es que mediante esta reunión, él reconozca que mi obra artística se corresponde con su agenda pública. Espero que podamos discutir y compartir inquietudes sobre la justicia social.
¿Significa esto que el Papa Francisco estará de acuerdo en conceder esas nacionalidades? ¿Existe algún precedente histórico de un evento así?
Resulta bastante compleja la cuestión legal. El Estado del Vaticano es una micro-nación donde está en vigor una de las más viejas, complejas, incluso extrañas legislaciones. Es una prueba sobre cómo la creación de leyes funciona como una estructura discursiva que responde a las condiciones presentes y cambia de acuerdo a las necesidades de los ciudadanos. En el caso de la legislación del Vaticano, el Papa no tiene poder para conceder ciudadanía inmigrantes indocumentados de todas partes del mundo. Si lo tuviese, sería un hecho sin precedentes.
Traducido al español por Ernesto Alvarez Valdivia